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    Un pensamiento sobre el blanco y negro

    Estaba dándome una vuelta por tebelogs, viendo noticias varias cuando, de rebote, me encontré con esta portada de John Byrne de hace ya mucho tiempo (cuando todavía sabía coger el lápiz, y dibujaba más que hablaba). Vía Bushi-comics.

    Spectacular Spider-Man 101

    Haz click para verlo más grande, como si tuviera que explicarlo…

    Y el caso es que estoy de acuerdo con el post original, una portada que sólo utiliza el blanco y el negro puede representar toda una época y puede transmitir muchas cosas en un dibujo que, a priori, sólo es de un tipo imaginario que se viste con un pijama para dar de leches a la gente.

    The Sandman, Vol. IX: Las Benévolas

    Acabo de terminar de leerlo, y es… en fin, es como… digamos que simplemente es. No voy a escribir una reseña absurda con una puntuación al final porque creo que no lo merece. Después de ocho tomos maravillosos con algunas de las más hermosas historias que haya leído nunca (bien sea en narrativa gráfica o textual), creía tener claro qué podía esperar de los volúmenes restantes. Pero no. Hasta ahora no parecía haber un hilo conductor claro, y entendía Sandman como un “campo de juegos” para Neil Gaiman, donde hacía y deshacía, y donde jugueteaba con todas las técnicas narrativas que se le ocurrían sin orden ni concierto, teniendo como fin último probablemente la mera estética. La hermosura del Arte con mayúsculas.

    Sandman

    Sueño y su hermana mayor, Muerte

    Pero no. Resulta que en el tomo nueve todo parece adquirir un sentido nuevo y se ve que todo viene de alguna parte y va hacia alguna parte. De hecho me parece una narración tan grande en su concepto que los cientos y cientos y cientos de páginas que ya he leído con anterioridad se me antojan nuevas otra vez. Creo que tras ver cómo todos los personajes aparecen de nuevo y van encajando en un puzzle mayor las historias previas deberían ser releídas para descubrir muchos pequeños detalles que en su momento dejé pasar sin prestar la suficiente atención. Y me queda el décimo tomo que, intuyo, será algún tipo de epílogo.

    Trece capítulos recopilados en un único volumen que constituye el, por ahora, mejor tebeo que he tenido el gusto de leer. Creo que entra directamente en esa categoría de obras a las que todo el mundo debería acercarse antes o después.

    Usabilidad

    If you don’t find it in the index, look very carefully through the entire catalogue.

    ¿Qué pasaría si nunca pasase nada?

    Que el ayuntamiento actual de Madrid financie una campaña publicitaria (autopublicitaria, claro está) con un mensaje progresista sería, como poco, sorprendente. Claro que no se refiere a asuntos sociales o políticos, sino simplemente a urbanísticos/inmobiliarios. Tranquilo, oh pueblo, que las obras que el faraón está llevando a cabo son necesarias.

    Estoy harto de Gallardón. Harto de que haya dejado Madrid empantanado económicamente para las próximas décadas (las obras ya las pagarán los proximos gobiernos, que por ahora paga el banco). Harto de tardar hora y media en llegar a trabajar en la misma ciudad en la que vivo. Harto de que los que vienen desde Arganda o Parla tarden menos en llegar que yo. Harto de que me cobren por comprar un coche, por circular, por gastar la vía pública y por aparcar. Harto de que una panda de analfabetos con trajes de “Agente de Movilidad” crean ser capaces de dirigir el tráfico y sólo causan atascos mayores. Harto de que el metro no abra de noche y se pague a empresas de autobuses para que hagan lo que debería hacer el metro. Harto de que cierren líneas de metro durante meses y meses. Harto de que la línea 5 siga siendo la más lenta y la que cuenta con trenes más viejos. Harto de la M30. Harto de que cada día cambie el recorrido, de circular por el cauce de un río, de que la cierren cuando quieran y de que hayan cortado casi todos los accesos y salidas. Harto de que se paguen cientos de millones de euros a una empresa por un peaje fantasma sobre la M45. Harto de las autopistas radiales de peaje que enriquecen a empresas privadas… Harto de estar harto. Dejo de escribir porque me hierve la sangre. Y eso que no he entrado en cuestiones inmobiliarias.

    Cuatro Caminos

    Pues desde luego Madrid seguiría siendo un lugar bonito para vivir.

    Al carajo con Microsoft (III)

    Atención: peñazo insufrible si no te interesa el tema, no me responsabilizo de los posibles traumas causados.

    Dado que el post relacionado con el primer día en realidad era de ayer, y hoy ya no pienso hacer nada más, aquí va la continuación.

    Día 2: Enchufo el disco duro externo USB y ¡oh, sorpresa! lo detecta y lo configura él solo. Hasta se me añade un acceso directo en el escritorio para facilitarlo todo. Sin preocupaciones por el tipo de sistema de ficheros ni nada por el estilo, pudiendo leer y escribir.

    Este disco duro está destinado a películas, series y música. Le doy a un episodio de una serie a ver qué pasa. Me abre el reproductor de vídeo Totem. Está abriendo… ups, me dice que no tengo los códecs. A ver, que esto pasa en Windows también. Resulta que sólo están instalados por defecto los códecs completamente libres, y esos son los menos. Así que, igual que con las fuentes instalamos un poco de todo.

    Buscando doy con este post de Maverick, sobre personalización de la instalación de Ubuntu Edgy. Directamente un par de líneas que a mí me han venido genial:

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    sudo aptitude install msttcorefonts gsfonts-other t1-xfree86-nonfree ttf-dustin ttf-f500 ttf-isabella ttf-larabie-deco ttf-larabie-straight ttf-larabie-uncommon ttf-staypuft ttf-summersby ttf-ubuntu-title ttf-xfree86-nonfree xfonts-artwiz xfonts-intl-european gsfonts-x11 gsfonts ttf-bpg-georgian-fonts ttf-sjfonts

    Con esto tenemos un par de trillones de fuentes para hacer los documentos un poco más bonitos.

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    sudo aptitude install totem-xine libxvidcore4 xvid4conf lame sox ffmpeg mjpegtools vorbis-tools mpg321 libxine1 libxine-main1 libxine-extracodecs gstreamer0.10-ffmpeg gstreamer0.10-gl gstreamer0.10-plugins-base gstreamer0.10-plugins-good gstreamer0.10-plugins-bad gstreamer0.10-plugins-bad-multiverse gstreamer0.10-plugins-ugly gstreamer0.10-plugins-ugly-multiverse gstreamer0.10-plugins-farsight gstreamer0.10-fluendo-mp3 gstreamer0.10-fluendo-mpegdemux gstreamer0.10-gnonlin gstreamer0.10-sdl faac faad alsa-oss libvcdinfo0

    Y con esto otro par de trillones de códecs y utilidades varias de cara a la reproducción de audio/video. Por ahora me ha funcionado todo lo que he probado excepto un episodio de una serie que me pide el códec “Windows Media Video 9”. No se quién habrá sido el anormal que ha codificado algo con ese códec, pero investigaré si se puede instalar algo similar… Y si no eMule proveerá de otra versión del episodio.

    Mañana más.

    Actualización: Problema solucionado instalando el paquete w32codecs. Gracias a Maverick que indicaba qué repositorio utilizar en los comentarios. Ya puedo ver todo lo que tengo guardado en el disco duro.

    Al carajo con Microsoft (II)

    Atención: peñazo insufrible si no te interesa el tema, no me responsabilizo de los posibles traumas causados.

    Día 1:

    CD de Ubuntu 6.10 descargado (desktop-i386) en un ratito.

    Instalación: dos particiones NTFS de 20 GB cada una (la original para windows más una para datos en general) transformadas en una partición ext3 para el directorio raíz, una pequeña partición de swap de unos 500 MB como apoyo a la memoria del sistema y otra partición ext3 de 20 GB más que ya veré con qué voy llenando (hda1, hda3 y hda2 respectivamente). Seleccionados los puntos de montaje de las particiones por defecto y añadidos hda2 en /media/hda2 y el disco SATA en /media/sda1. Tengo mis dudas sobre si ese hda2 está montado donde debe o no, pero parece que no se queja.

    El resto de la instalación es la típica de cualquier sistema automatizado: zona horaria y fecha, usuario inicial y tipo de teclado. Nada más.

    Es algo sorprendente que no te pida ningún dato para crear el usuario root (el administrador principal), pero como el usuario inicial es sudoer por defecto, puedes realizar posteriormente cualquier acción ("sudo " para ejecutarlo con permisos de root o “sudo su” para convertirte en root, algo que no debería ser necesario).

    Nada más arrancar el gestor de actualizaciones te avisa de que hay actualizaciones pendientes (la red funciona a la primera sin yo tocar nada, claro que tengo router y no sé si con un módem se quejaría). Dado que la distribución es bastante reciente apenas había 12 actualizaciones que se instalaron en un par de minutos. Calculo que en total la instalación duraría poco más de una hora, teniendo en cuenta que ya vienen instalados por defecto Gnome, Firefox, OpenOffice y un millar de cosas que aún no he podido probar.

    Único problema encontrado: el de siempre, no podía poner la resolución de pantalla como tiene que ser porque no me dejaba escoger nada superior a 1024 x 768. Ya intuía lo que era pero como estoy asumiendo que soy un analfabeto digital lo busco en Google. Me da un par de resultados de ubuntu-es y voy probando. Es lo de siempre, cambiar la configuración de las X para que en lugar de usar nv (por defecto) use el módulo nvidia. Intento la primera solución que encuentro y no noto ningún cambio. Intento la segunda solución y me cargo las X por editar el archivo de configuración (xorg.conf) a mano sin saber muy bien lo que estaba tocando. Reinicio ubuntu en modo “a prueba de fallos”, recupero el backup del archivo de configuración y reinicio de nuevo con el mismo sistema que teníamos antes de empezar.

    Vuelvo a buscar otra solución a ver si me había saltado algo y doy con la solución final. “sudo dpkg-reconfigure xserver-xorg” y te sale un menú fantabuloso para editar el mismo archivo que yo estaba tocando pero con un poco de ayuda para no meter la pata. Hay que seleccionar el driver nvidia en la primera pantalla que sale y el resto se puede dejar por defecto. Yo aproveché para cambiar alguna cosa, sobretodo dejar como posibles las resoluciones más altas (1152 x 864 y 1280 x 960, que es la que tengo ahora mismo. Cualquier otro número no sigue la misma relación matemática que 800 x 600, así que no me seáis mendrugos), y creo que poco más. Tras eso, añadir nvidia al /etc/modules y ale. Ctrl+Alt+Delete para reiniciar las X y ¡tachán! Resolución máxima por defecto. Para una explicación más extendida, échale un vistazo al enlace, que para eso está.

    Todo se me veía muy brillante y contrastado, y ya estaba pensando en ponerme a configurar algo cuando me dí cuenta de que, no se la razón, tenía el monitor con esos valores muy altos. Supongo que Windows me estaba mostrando todo demasiado poco saturado y lo subiría para algo. De todas formas está el “nvidia-settings” que abre un menú de configuración de los de toda la vida donde he activado antialiasing, anisotropic janderklander y demás pijadas que hacen que todo se vea un poco mejor.

    Ahora mismo estoy escribiendo esto desde el nuevo sistema, así que todo parece funcionar perfectamente. Ya os iré contando nuevos progresos.

    Actualización: Ups, segundo problema. Era obvio pero no me había dado cuenta. Esta web (y muchas otras) se ven… “raras”. Algo lógico teniendo en cuenta que no se instalan por defecto las fuentes que los sistemas Windows suelen usar (Arial, Times New Roman, Verdana, etc). La solución aquí. Permitir que Ubuntu busque paquetes en el repositorio “universe”, que incluye código y programas que no tienen por qué ser libres. Hay que descomentar las líneas donde indica el repositorio “universe” y añadirle también el “multiverse”. Creo que los nombres son un poco pretenciosos, pero somos informáticos, es lo que hay. El paquete concreto que hay que instalar es “msttcorefonts”. Si eres un talibán y no quieres que nada con el nombre de Microsoft “manche” tu equipo, no las instales. A mí como me da igual… Tardan un poco en descargarse, eso sí.

    Al carajo con Microsoft (I)

    Ya está, ya me cansé. Al hilo de un post de hace poco sobre los “Expedientes X” que estaban produciéndose en mi(s) ordenador(es) con Windows XP, he de añadir que ya me he cansado.

    No soy un usuario inexperto mosqueado con nadie, ni me he dejado llevar por la publicidad de unos o de otros. He trabajado durante bastante tiempo como administrador de sistemas y creo que sé de lo que hablo. Siempre he tenido dos excusas que me han servido para seguir manteniendo Windows como mi sistema operativo “por defecto”, utilizando otros únicamente para solucionar problemas concretos e identificables (siempre hablando de PCs, claro está):

    • Linux siempre me ha parecido un sistema para propósitos concretos, no de uso general. Como servidores, para desarrollo, para instituciones o laboratorios, sería mi primera opción, pero como ordenador de sobremesa nunca lo he visto del mismo modo que Windows. Tradicionalismo, quizá. A un usuario medio le enseñas el directorio raíz de un Linux cualquiera y no sabe donde está nada (y no me extraña, porque la mitad de las veces yo tampoco).
    • Quienes se quejan de Microsoft generalmente no saben utilizar su sistema operativo con la misma profesionalidad con la que saben configurar un millón de cosas en un Linux. Si indagas dentro de un Windows generalmente las cosas se pueden toquetear bastante. Al final todo se resume en un “a mí me funciona y no se me cuelga ni me funciona mal”.

    Pero es que ya me da igual, porque esto ha cambiado mucho últimamente:

    • He probado un poco Ubuntu en el portátil. Me parece lo suficientemente intuitivo como para querer utilizarlo. Y si algo se pone tonto, está basado en Debian así que asumo que podré meter mano todo lo posible (otro de los equipos que tengo en casa lleva Debian, así que experiencia hay). Me parece la piedra angular que necesitaba para empezar una mudanza seria, algo que representa lo mismo que Firefox en el mundo de los navegadores. Es algo que parece serio, profesional, sencillo, potente… Qué mas voy a contar que no se sepa ya.
    • Por mucho que vigile mi ordenador, ahora ya me ignora. Estoy cansado de tener un firewall que se mosqueda con el antivirus, y viceversa. Ni que decir que tener ambas cosas funcionando constantemente, más el desorbitado consumo de recursos que WinXP ya lleva “de serie” hace que parezca que mi ordenador tiene cinco años más. Es un PIV a 2,4 GHz, y para lo que lo uso tendría que ir como un cañón. Harto de instalar programas anti spyware/adware/etc. Harto de que un problema que debería ser simple se transforme en horas de buscar la razón original de la que no se te proporciona información.
    • Harto de que ayer le dieran al ordenador de sobremesa yuyus muy raros y se quedara en estado catatónico durante varios minutos antes de dejarme seguir con lo que estaba haciendo. Harto de que ayer tardara varias horas en grabar unos míseros dvds. Lo siento pero mi tiempo vale dinero, y Microsoft está acaparando ese tiempo.

    Así que llevo todo el día haciendo una gran limpieza en ese ordenador. Un disco duro IDE de 40 GB, otro SATA de 160 y uno externo USB de 250. Es sorprendente lo que uno almacena con el paso del tiempo. He tenido que limpiar bastante, pero ya estoy en condiciones de empezar con la migración. Porque si las cosas se hacen, se hacen bien. Me olvido de compaginar varios sistemas operativos y demás mandangas. Me voy a instalar la última versión de Ubuntu (6.10) y que sea lo que El Monstruo Espagueti Volador quiera.

    Ubuntu

    Iré informando de los posibles problemas que una migración completa puedan traer. Así, a bote pronto, no sé como me irá el tema de la grabadora de dvds, o la descarga de archivos por redes P2P, porque nunca he usado programas para esas tareas bajo Linux. Para otras cosas la mayor parte del software que voy a utilizar ya es como de la familia, pero habrá que ver qué tal me va en el día a día.

    Ya os contaré.

    Recetas para una vida mejor (II)

    Dado que planes anteriores parecen no concretarse, y hoy estoy sentado en mi mesa con unas inmensas ganas de levantarme y gritar:

    Menos mal que no existe un colegio de informáticos y no es obligatorio firmar proyectos, porque si yo tuviera que firmar esto, ¡no lo haría! Si el código es poesía, yo estoy escribiendo El Código Da Vinci de todos los programas. ¡No se puede trabajar así!

    Pero en lugar de gritar he recordado una de las viñetas de la semana pasada de Gaping Void:

    Gaping Void, por Hugh MacLeod

    Alexa sabe que existo

    Hoy es uno de esos… cómo decirlo… días de mierda. No me apetece escribir sobre nada, así que os vais a tener que contentar con esto: Alexa se ha dado cuenta (por fin) de que existo. Existo muy levemente, como si estuviera en un país lejano que a nadie importa, pero existo. Debería echarle un vistazo a ver qué narices significa la gráfica y unos cuantos datos más que pueden verse, pero no tengo ganas.

    Existo en Alexa. Guau.

    Me he enterado porque en el perfil de la página en technorati ya no dice eso de “Not in first x” o algo así, siendo ese x un número ridículamente grande. Es decir, sigo siendo un don nadie absoluto, pero un don nadie con una gráfica.

    Y hoy me han regalado una agenda en el trabajo. Con logotipo y todo. Tenemos nuestro propio pan y circo.