A blast from the past.
- Categoría de cine y los posts titulados “Reseñas cinematográficas relámpago”.
- Categoría de televisión y los posts titulados “Movidas catódicas”.
- Lectura de todas las novelas premiadas con el Premio Hugo.
- Revisionado de Smallville siguiendo el Podcast Talk Ville que están haciendo Michael Rosenbaum y Tom Welling (acaba de empezar su revisionado la segunda temporada cuando escribo estas líneas, yo por ahora he visto unos pocos de la primera). Ver el capítulo y luego escuchar su podcast me parece la forma idónea de acometer esto.
- He comenzado ya con la serie sobre el revisionado de todo Star Trek (estamos locos) y el primer post que continúa el texto de la página, sobre el primer episodio piloto de la serie, perdido durante dos décadas.
- En mi ánimo nostálgico por regresar a las cosas que me proporcionaron felicidad, también volví a comenzar Expediente-X, y sigo con la fantasía recurrente de que volver a ver Perdidos más de una década después de que terminase quizá fuese algo interesante que hacer. Me da miedo, pero serían dos buenos temas sobre los que ir escribiendo posts conforme avanzase.
- Veo bastante Anime, y creo que es algo de lo que apenas he hablado por aquí en alguna ocasión. Pero con tantas series tan parecidas unas a otras, tanto Isekai, desde el final de una temporada hasta el comienzo de la siguiente pasa tanto tiempo que empiezo a mezclar personajes y tramas, y quizá debería hacer lo mismo y dejar apuntados algunos resúmenes… porque he tenido que volver a empezar desde el principio Overlord, Danmachi o Re:Zero porque en mi mente todas son la misma serie.
- Artículo sobre el episodio piloto en Forgotten Trek.
- Y en la Wikipedia.
-
Magnífico hilo en Twitter de Manuel de BCN y sus #MakeThemLaugh acerca de la relación entre las series Friends y Mad About You, sobre todo a través del personaje de Úrsula Buffay, la gemela malvada de Phoebe.
Más fácil de leer en threadreaderapp.com. Qué poco me gusta esta costumbre de tener largos textos en Twitter sin tener una web asociada donde publicarlos mejor.
-
Al hilo de intentar frenar la presencia en Twitter: después de ver el episodio s03e02 de Evil (serie que recomiendo, de la que deberíamos hablar más): The Demon of memes, y después de un par de ocasiones en las que viendo TikTok o reels de Instagram al volver a mirar el reloj habían pasado dos horas sin que me diera cuenta, he borrado la cuenta y la app de TikTok del móvil.
Captura de pantalla de Evil s03e02 sacada de themoviedb.
En Instagram para mi desgracia tengo muchos contenidos de muchos años, pero estamos trabajando en ellou.
Este post forma parte de una serie sobre el revisionado completo de todo Star Trek,
es recomendable empezar por ahí.
Pues entramos en harina. Después de ver el piloto perdido no aprobado por la cadena, empezamos con la primera temporada propiamente dicha. Spoilers ahead, obviamente, pero que esto tiene ya casi 60 años desde que se emitió por primera vez.
The Man Trap (s01e01)
Por fin el elenco definitivo de la serie original, William Shatner como el Capitán Kirk, Leonard Nimoy como el primer oficial Doctor Spock y DeForest Kelley como el médico Leonard “Bones” McCoy, como personajes principales. Aparecen como secundarios en este episodio varios de los futuros protagonistas: George Takei como el piloto Hikaru Sulu y Nichelle Nichols como la oficial de comunicaciones Nyota Uhura. Nos faltan por ahora Scotty y Chekov. Qué cosa más bonita de tripulación.
La Entreprise llega a un planeta remoto a proporcionar los obligatorios exámenes médicos de la Federación a sus dos únicos habitantes: un arqueólogo y su esposa. Enseguida se tuerce la situación cuando los espectadores vemos que cada personaje percibe a la mujer como una persona diferente. ¡Ups! Algún tipo de cambiaformas, y se infiltra en la Enterprise. Pobre McCoy, que pensaba que iba a visitar a un antiguo amor de juventud.
Tremendo esto, me ha encantado. Con un poco de corchopán y decorados de obra de teatro de colegio ya tienes en 1966 montado el inicio de una franquicia interminable.
Curiosidad del día: Sulu es una palabra difícil de pronunciar en japonés, por lo que en algunos de los doblajes nipones Sulu se llama Kato.
Como persona obsesiva que soy, cuando me da un por un asunto cualquiera lo acabo convirtiendo en un vertedero de tiempo mientras busco por internet, investigo, recopilo información y enlaces… para un mes después no recordar nada de lo que he hecho, ya que mi obsesión ya habrá pasado a ser otra. Según apunto décadas en el contador particular, los recuerdos insignificantes permanecen durante menos tiempo. No sé si porque ya no me impresionan tanto como antes, si porque mi obtuso cerebro no funciona en plenitud de funciones, o simplemente porque el número de mitologías privadas que es capaz de almacenar una mente ya ha hecho tope, y las nuevas no entran.
Así que no me parece una mala idea utilizar este blog como un repositorio de estas ensoñaciones pasajeras y la información que vaya recopilando al respecto. Si lo dejo todo apuntado, hay un doble efecto: por un lado, escribir y desarrollar un texto de un tema cualquiera siempre hace que lo asimiles y recuerdes mejor. Por otro lado, si no surte efecto al menos podré volver a visitar mi propia página y consultar lo que dejé apuntado.
Hace poco leía que lo bueno que tenía la incipiente Internet 2.0 de los blogs creciendo como setas tras un día de lluvia es que no había una razón económica detrás, y en la mayor parte de ocasiones ni siquiera de atención. Si querías escribir en un rincón de Internet acerca de bordado en punto de cruz, lo hacías. Y si abandonabas la página un año después tampoco pasaba nada, no era un fracaso. Ahí estaba tu esfuerzo para que el siguiente aprendiera, creciendo a hombros de gigantes.
Tendencias históricas del término Web 2.0 según Google Trends. Este blog empezó en el 2006.
A lo largo de los años he ido tomando notas de (algunas de) las películas que iba viendo, y últimamente he empezado a hacerlo con algunas series de televisión:
Un buen ejercicio sería obligarme a escribir al menos unas líneas sobre todo lo que consumo relacionado con esas categorías que, para mi desgracia, es más de lo que me gustaría admitir.
🔗 No es la razón para escribir estas líneas, pero me ha hecho gracia.
Pero además de estas pequeñas notas, algo que me gustaría ir haciendo poco a poco es dejar escritas páginas aglutinadoras de múltiples post sobre un mismo tema, para poco a poco ir haciendo que el repositorio de información temática vaya siendo lo suficientemente grande.
Por ejemplo, quise empezar a hacerlo con la página Los Premios Hugo, donde iba a ir apuntando las reseñas de cada novela premiada que me leyera pero, para mi escarnio y vergüenza, no pasó de una primera entrada cuando leí Pórtico, y no volví a actualizarlo. Pero eso es lo que quiero hacer a partir de ahora, ir tomando notas poco a poco sobre algunos de los “grandes proyectos para el blog” en los que estoy o tengo idea de estar:
¿Saldrá algo de todas estas ideas de “voy a…”, “voy a…”? Pronto lo sabremos, en el mismo bat-canal a la misma bat-hora de siempre.
A veces tiene uno un día muy Omar Little.
Este post forma parte de una serie sobre el revisionado completo de todo Star Trek,
es recomendable empezar por ahí.
¿Por dónde comenzar? Por el principio. Si empezamos a ver Star Trek desde su origen tenemos que empezar por el primer episodio de la primera temporada de La Serie Original, ¿no?
No. Porque anteriormente a ese comienzo se rodó un primer piloto que estuvo parcialmente perdido durante unos cuantos años (como tantos y tantos episodios de Doctor Who). En 1965 se rodó este piloto, con el título “The Cage” como prueba para la NBC, con algunas cosas comunes pero con unas cuantas diferencias.
No teníamos a William Shatner haciendo de Capitán Kirk, sino a Jeffrey Hunter como el Capitán Pike (personaje que un millón de años después sería retomado para aparecer en el retcon cinematográfico de J.J. Abrams y en la serie Discovery). Sí teníamos ya a Leonard Nimoy como Doctor Spock, de hecho el único actor del elenco que se mantendría después de este piloto, aunque aquí no era el primer oficial. Ese puesto lo tenía la actriz Majel Barrett (futura esposa de Gene Roddenberry, creador de la franquicia), sin un nombre concreto, sólo Number One.
Hay ideas que ya estaban ahí, como un médico que hacía las veces de confesor del capitán (aquí un cheñor mayor), la preciosa banda sonora, las naves, los efectos (era un episodo piloto bastante caro para la época, aunque ahora lo veamos tan desfasado, 58 años después), pero a la NBC no le gustó. Quedaron complacidos con el concepto, pero no con el desarrollo, así que pidieron que se volviera a hacer, con un episodio menos “cerebral”, con más acción, y cambiando las elecciones de casting buscando una mayor química entre los actores. Con esas premisas y con nuevos actores se rodó “Where no man has gone before”, el nuevo piloto que se mostraría a la NBC, que sería esta vez aprobado y acabaría emitiéndose ordenado como el tercero de la primera temporada.
Sin embargo hay que aprovecharlo todo, que estas cosas son caras de rodar. Así que parte del metraje de “The Cage” se utilizó para los episodios 11 y 12 (“The Menagerie”, partes I & II), pero en el proceso de montaje se dieron por perdidos los originales de este primer piloto. Durante 20 años la única forma que hubo de verlo fue un montaje parcial usando una copia en 16mm en blanco y negro creada por Roddenberry para usar como referencia, intercalado con los minutos a color que sí sobrevivieron al proceso. Quiso el destino que en 1987 un técnico encontrase un rollo en un laboratorio de Hollywood con un negativo en 35mm que tenía una copia del original, que llevó a la oficina de Roddenberry en la Paramount, y a partir de ahí comenzó un proceso de restauración que nos devolvió el piloto perdido que ahora podemos ver como curiosidad previa al comienzo de la serie.
Otros enlaces:
🔗 I had to fight like hell, and fighting like hell has made me what I am.
Dreams are forever, but the rent is due each month.
Por una casualidad de la vida, he encontrado esto hoy. Quizá a alguien le anime el día.
La felicidad nunca está fuera, en ningún sitio, en ningún atardecer frente a ningún mar, ni frente a una aurora boreal en Kiruna ni frente a un lienzo de Vermeer en el Rijksmuseum. Está muy dentro, muy hondo, pero nadie más que tú guarda las llaves de ese cofre.
Aprovecho para recomendar Nada Importa, la newsletter de Jesús Terres, a quien leo ahí y en otros sitios desde hace ya unos cuantos años.