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    Yamaha M1, 990cc 4T

    46 - Valentino RossiVa a ser la moto campeona del mundo de motoGP, otra vez. La caída de Hayden y Pedrosa es absurda, pero esta carrera estaba ganada igualmente. Il Dottore sigue siendo el rey. Aún no ha terminado la carrera y no sé si Elías conseguirá adelantarse, pero de cara al mundial tiene poca importancia.

    Lástima que yo ya le tenga echado el ojo a esta preciosidad (quizá en negro), nuevo modelo de 2006. Suzuki GSX-R 600, si es que me estoy convirtiendo en un hedonista en busca del placer en cualquiera de sus formas.

    Actualización: Victoria de Elías por dos milésimas, con foto-finish incluida. La última vuelta ha sido genial. 8 puntos de ventaja para Rossi cuando sólo queda Valencia para terminar el mundial.

    Mi nuevo juguete

    Superman - Red SonAunque en realidad ya lo compré hace un par de semanas, y desde entonces tenía ganas de ponerlo por aquí. Estas cosas siempre cuestan un dineral y suelen responder únicamente a compras impulsivas e inexplicables. Estaba en la estantería y me lo llevé.

    De las nuevas colecciones ElseWorlds de figuras de DC, es el único que me interesaba de la primera serie. De la segunda sin embargo, ya están las figuras de Batman y Superman Presidente que llaman bastante la atención. Aún está por salir la tercera serie que incluye, entre otros, la versión Red Son de Hal Jordan (Green Lantern).

    El tebeo es altamente recomendable: ¿Qué habría pasado si la nave en la que se estrella Kal’El contra la tierra hubiese caído sobre Rusia en lugar de sobre Kansas? Está bastante conseguido, aún sin ser un joya. De todas formas cualquier tebeo de Mark Millar [wikipedia] es de lectura obligada.

    Otro que podría interesarme, de otro tebeo aún mejor que el anterior: El Espectro de Kingdom Come, también dentro de la misma colección.

    Cállate la boca...

    La mayor parte de la gente que me conoce sabe que siempre he preferido abrir la boca y meter la pata antes que callarme algo que pienso. Debo estar haciéndome mayor, porque hoy me he callado.

    En mi trabajo vamos a cambiar de edificio, a uno nuevo, todo acristalado y tecnológico. Eso incluye un nuevo sistema de control de accesos por huella dactilar y tarjeta. El diseñador del sistema de seguridad ha sido un niño de cinco años con problemas de desarrollo intelectual y emocional, dado que no tiene el más mínimo sentido. Se instalarán tornos de entrada con sensores para las huellas. Como eso es muy lento, han optado por (o eso me ha parecido entender de lo poco que han sabido explicar los de recursos humanos) introducir los datos de dichas huellas en unas tarjetas de proximidad. Así, sólo con acercar las tarjetas al sensor, nos detecta. Para eso daban igual los datos a introducir dentro de la tarjeta, lo mismo podían ser datos de la huella dactilar que el número de trabajador, que habría sido más fácil. Supongo que simplemente nos lo han explicado mal porque no comprenden lo que van a instalar, porque de otro modo no entiendo nada.

    Además, dado que, según ellos, los tornos de entrada al párking no proporcionan la seguridad suficiente (¿entonces para qué instaláis nada?), van a poner otro sensor en la entrada de cada planta, para evitar que nadie que se haya colado por el aparcamiento pueda circular por dentro del edificio. Es absurdo, lo sé.

    Así que han enviado un email a todo el personal para tratar de explicar esta colección de disparates y, entre las perlas, mencionan que los controles de cada planta no son para controlar a dónde va cada trabajador (lo siento, pero no me lo creo), y que el sistema no almacena datos de carácter especialmente protegido.

    Cómo no, tuve que responderles al email (quién me manda abrir la boca) para decirles que esos datos son, obviamente, de carácter personal, y deben ser tratados como tales. Ellos me han respondido diciendo que ellos no han hablado de datos personales en ningún momento, sino de datos de carácter especialmente protegido. Según la LORTAD, esos datos son los de ideología, religión o creencias y sólo pueden ser recogidos con autorización expresa por escrito del trabajador.

    Me centro: que lo mismo podían haber informado de que los datos almacenados no son encíclicas papales o de que no son guiones para tebeos de los X-Men, que tiene la misma utilidad. Todo el mundo sabe que no son datos de ese tipo, pero el email que nos enviaron confunde al personal mezclando conceptos. Al final se tratará de que lo han hecho a propósito para confundir a la gente; o eso o he visto La Tapadera demasiadas veces.

    Y cuando estaba explicándoselo en otro email de respuesta he pensado: ¿para qué? Si a estas alturas me da igual. Además tampoco es cuestión de hacerme el listo y acabar cayéndole mal a alguien de recursos humanos, que son los que dan las nóminas a final de mes.

    No pudo ser

    No siempre sale todo como a uno le apetece. Pero eso no quita para que piense que cierta persona que ayer estaba en cierto bar, cada día esté más… en fin. Que la cuestión es contentarse con que aún queda Brasil.

    No te lo tomes tan en serio

    Once upon a time there was a bear and a bee who lived in a wood and were the best of friends. All summer long the bee collected nectar from morning to night while the bear lay on his back basking in the long grass.

    When Winter came the Bear realised he had nothing to eat and thought to himself ‘I hope that busy little Bee will share some of his honey with me’. But the Bee was nowhere to be found - he had died of a stress induced coronary disease.

    En un contenedor de basura en Notting Hill, por Banksy.

    Vía: The Chief Happiness Officer, que nos enseña cómo deberíamos trabajar.

    ¿Estás seguro de lo que haces?

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    ¿Es esa la intención? ¿Eh, tipo duro?

    Cuando el entorno de programación empieza a dárselas de listo me pone nervioso.

    Declaraciones

    En los episodios de final de la segunda temporada de Scrubs:

    Elliot se va a vivir con su nuevo novio, y J.D. se da cuenta, por fin, de que tiene que hacer algo:

    - Debería ser yo.
    - ¿Qué?
    - Mira Elliot, todos los años estamos igual, y yo nunca he tenido el valor de decirte lo que siento. Estoy loco por ti. Y quiero que sepas que si tuviera la oportunidad de pasar el resto de mi vida con alguien, sentados en el sofá comiendo pizza y viendo la televisión, siempre te elegiría a ti.
    - Yo… tengo que irme.

    A veces hay que echarle valor a la hora de tomar decisiones, aunque luego resulte que son decisiones erróneas. Como la de J.D., a la vista de cómo termina la temporada. Pero al menos hizo lo que creía correcto, y eso nunca debería ser malo, ¿no? Se está poniendo muy dramática, a ver cómo continúa la tercera.

    En palabras del conserje (otro de los personajes): “Oye, que no sois Ross y Rachel”.