Joy (David O. Russell, 2015)

No habría dado para mucho más que telefilme de sobremesa, pero eh, si también con eso ganó un Oscar Sandra Bullock con The Blind Side, una película diseñada para mayor gloria de Jennifer Lawrence tenía que convencer a crítica y público. Pese a ser muy correcta a mí particularmente me ha parecido prescindible.

Spotlight (Tom McCarthy, 2015)

Poco más puedo decir también de Spotlight, realmente brillante a nivel técnico, con un ritmo muy bien llevado… pero que, al final, acaba siendo un ¿docudrama? ¿un biopic de una investigación periodística? Me pareció que le faltaba algo de conflicto a una narrativa muy de “investigamos esto, publicamos la noticia, fin”.

Before we go (Chris Evans, 2014)

Y al final sin embargo me sorprenden las tonterías más desconocidas, como este experimento de Chris Evans en un descanso entre capitanes américas y vengadores, en labores de dirección, producción y actuación. Una historia romántica sin caer en la ñoñería fácil, con final abierto y varios momentos curiosos. Pasó y pasará desapercibida, porque no es más que una película de relleno y, sin embargo, ahí le veo su virtud.